Como escoger tu frigorífico

Es habitual que cuando se estropea el frigorífico de casa tengamos la sensación de que se cierne la catástrofe sobre nuestro hogar, no solo por todo lo que guardábamos dentro de él, que se va a echar a perder o per el dinero que acarrea comprar otro, sino por el hecho de tener que escoger uno nuevo entre toda la variedad de frigoríficos que podemos encontrar en la tienda hoy en día. Afortunadamente, solo debemos pararnos a pensar un momento y escuchar los consejos que os traemos a continuación.


Tipos de frigorífico: medidas y clases

¿Qué tipo de frigorífico es mejor? 

 

Primero de todo, debes indagar un poco sobre tus necesidades y gustos. En teoría, una persona soltera estará todo el día fuera de casa y no necesitará de un modelo con las prestaciones que requeriría una familia numerosa, pero la vida a veces es un poco más complicada.

 

Para empezar a entrar en tema, primero de todo debemos tener en cuenta que altura ha de tener el frigorífico. No es algo definitivo, porque lo importante es su capacidad neta, tanto de la nevera como del congelador y ver si necesitamos más de una cosa o de la otra.

 

 

·         Hasta 150cm. Los minibar y los frigoríficos bajo encimera entran en esta categoría. No son muy habituales en los hogares españoles, pero si apenas vas utilizar la nevera en casa podría servirte para ahorrar dinero.

·         De 150 cm a 170 cm. Frigoríficos pequeños. Una opción recomendable para los solteros que pisan la cocina una vez al mes.

·         De 170 cm a 185cm. Frigoríficos medianos. Una de las opciones más habituales, sobre todo en las neveras de dos puertas y combi.

·         De 185 cm a 195cm. Neveras grandes, con un tamaño suficiente para una familia numerosa, bastante extendidos a partir de los años noventa.

·         Más de 195 cm. Los frigoríficos de mayor tamaño, una solución útil para las familias pero una mala opción si apenas vas a guardar cosas dentro. 

 

Esta clasificación no debe ser definitiva. Tómatela como una pequeña guía orientativa para centrarse en frigoríficos de dos o tres tramos de medidas diferentes, siempre teniendo en cuenta la capacidad real de cada nevera. 

(foto)

·         Frigoríficos de una puerta: ¡Vigila! Son únicamente neveras y no tienen la función de congelar alimentos. Están orientados hacia aquellas personas que van a comprar a diario o los que ya tienen un congelador independiente en casa. Están disponibles en tres formatos: minibar, bajo encimera y los tradicionales, de gran capacidad.

 

·         Frigoríficos de dos puertas: Llegaron a ser muy populares tiempo atrás y todavía son una alternativa para mucha gente por su económico precio. Desgraciadamente en su ergonomía dejan que desear por el hecho de que los congelados se encuentran en la parte superior y las frutas y verduras a los pies. Si tienes un apartamento en la playa es una opción a contemplar, ya que durante el verano el congelador es una prioridad.

 

·         Frigoríficos combi: También de dos puertas, pero en este caso con el congelador en la parte inferior y la fruta y verdura en la zona más cómoda. España es uno de los países europeos que más opta por este tipo de modelos. Presentan una buena relación calidad/precio incluso en modelos con el consumo energético más eficiente de todos.

 

·         Frigoríficos side by side. Habitualmente conocidos como frigoríficos americanos. Los tradicionales llevan dos puertas verticales, con el congelador a la izquierda y la nevera a la derecha. Acostumbran a tener dispensador de agua y hielos y representan una opción a tener en cuenta para las familias numerosas por su gran capacidad. 

 

·         Frigoríficos de puerta francesa. Igual que los americanos tienen dos puertas verticales, pero separa dos zonas de refrigeración para optimizar el consumo y relega el congelador a la zona inferior. Suelen ser también de gran tamaño. 

 

·         Frigoríficos de cuatro puertas. Evolución natural de los modelos de puerta francesa, con un cajón intermedio flexible que puede ser utilizado como zona de refrigeración independiente o congelación rápida. Reservado a las gamas más altas.

 

 

Puntos clave de un frigorífico

·         El ruido: Un punto importante que suele pasar inadvertido a la hora de escoger un frigorífico nuevo. Pero lo cierto es que resulta crucial, porque una nevera ruidosa es el peor enemigo para la paz en casa. Es interesante asegurarse si el fabricante garantiza que el funciona a pleno rendimiento del aparato se sitúa por debajo de los 45 decibelios, lo que sería equivalente al sonido que existe en una biblioteca. 

 

·         La personalización. Una nevera fija puede resultar un incordio en días movidos como navidad o tu cumpleaños. Un factor interesante para elegir entre un frigorífico u otro es fijarse en el número de bandejas y baldas modulables disponibles, ya que más pronto que tarde lo necesitarás. 

 

·         No Frost: Aunque sea una característica muy habitual hoy en día, no deja de resultar casi imprescindible a la hora de comprar el frigorífico. Con ello olvídate de descongelar al menos una vez al año el frigorífico para eliminar las placas de hielo. Si vives en una zona cálida te recomendamos un no-frost total, tanto en la parte frigorífica como en el congelador.

 

·         La capacidad: Para una persona sola 125 litros entre nevera y congelador acostumbra a ser suficiente, mientras que una familia con cuatro personas necesitará alrededor de 500 litros de capacidad. Igualmente es importante si se va a necesitar más o menos espacio en el congelador.

 

 

·         Zonas de frío diferenciadas. Permite diferenciar alimentos y aislar olores, lo que alarga la vida útil de los alimentos. A modo de ejemplo, el enfriamiento ultrarrápido de botellas y latas; una de las características que más ha avanzado en los últimos años y que resulta más atractiva para el consumidor.

 

·         Dispensador de agua y hielo. Algunos no podrían vivir sin ello, sobre todo en verano. Por contra, eso sí, deberás incorporar una toma de agua al frigorífico, lo que no es siempre posible.

 

·         Luz. Aunque la mayoría de modelos actuales han dejado atrás esas horribles luces amarillentas gracias a la iluminación LED todavía resulta recomendable comprobarlo en persona para ver si ilumina todo el frigorífico. 

 

·         Puertas reversibles. La configuración de la cocina, a veces, te obliga a cambiar el sentido de apertura de la puerta. Casi todos los frigoríficos nuevos tienen esa posibilidad, pero es importante comprobarlo antes de comprar.

 

·         Frigoríficos inteligentes. La nueva generación de frigoríficos incorpora pantalla exterior con información sobre los alimentos, conectividad WiFi o Bluetooth y todo tipo de modos para adecuar el funcionamiento de la nevera a la carga o época del año. Puede ser realmente interesante tener una aplicación en la que consultar toda esta información sobre tu frigorífico cuando estés lejos de casa, pero si esto va a encarecer el precio a lo mejor aún no merece la pena este tipo de inversión.

 

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